Había una vez una mujer muy vanidosa y mala que se caso con un buen hombre y tuvieron 2 hijos.
La mujer perezosa no cumplía con sus labores domésticos y maltrataba a sus hijos. Un día el marido cansado de la situación le dijo que ya estaba harto de llegar cansado con hambre y solo encontraba mugre; pero la mujer con sus encantos lo convencía.
Un día mientras la mujer cocinaba uno de sus pequeños corría jugueteando y sin querer tiro unos platos, ella lo agarró con rabia y se le vino la perversa idea de matarlo, lo cocinó y lo guisó en sopa,cuando llegó su marido quiso consentirlo y lo invito a cenar. El marido empezó a comer la sopa pero al comer encontró un dedo del niño y el hombre salto asustado gritando por lo sucedido y corrió a preguntarle que había hecho, porqué había un dedo humano en la comida ; la muy cínica le dijo que siguiera comiendo, que había guisado a su hijo, que ya le había hartado y que sabia delicioso.
Después de ese incidente, a la mujer le cayó una maldición, la mujer se volvió loca y vagaba por los cerros aullando como una loba desesperada, llorando buscando a su hijo.
Se cree que hasta la fecha se escuchan sus aullidos por las noches y la gente de los alrededores teme por sus hijos.
Leyenda enviada por: Silvia Gil